Se vivieron momentos de mucha tensión durante el acampe que lleva a cabo Juan Grabois en Lago Escondido

Este martes en horas de la tarde de vivieron varias situaciones de mucha tensión durante el acampe que lleva a cabo el referente de movimientos sociales Juan Grabois junto a cerca de 100 personas en Lago Escondido. El dirigente manifestó insultos y amenazas hacia trabajadores del lugar como así también al personal policial. El momento de máxima violencia sucedió ya al comenzar la noche cuando estaban siendo evacuadas varias personas que formaban parte del acampe y según relatan los testigos, “Grabois habría agredido al conductor del vehículo que los guiaba y a una mujer, ambos empleados de Lago Escondido”. Desde horas de la mañana hay custodia en el lugar llevada a cabo por cerca de 10 efectivos policiales.
Tal como quedó plasmado en numerosas imágenes, este martes se vivió una tensa jornada durante el acampe que desde la mañana comenzaron a llevar a cabo cerca de 100 personas lideradas por el referente de movimientos sociales, Juan Grabois y el diputado nacional del Frente de Todos, Federico Fagioli.
Grabois en varias oportunidades increpó a los trabajadores de Lago Escondido, acusándolos de “defender a un inglés” y otras expresiones amenazantes. Según relataron muchos de los 160 trabajadores que tiene el lugar, “hay miedo por lo que pueda llegar a suceder”.
El momento de máxima tensión se produjo al comenzar la noche cuando según relatan, “Grabois había pedido evacuar a unas personas y se enojó porque el carro que los iba a guiar hasta la salida no se apuraba como él pretendía y golpearon al conductor y patearon a una empleada”.
Desde horas de la mañana, los militantes levantaron carpas en los alrededores de la mansión del empresario inglés. Algunos de ellos ya habrían solicitado baños químicos y agua caliente puesto que no está definido cuánto tiempo se van a quedar en el lugar. Grabois conversó con representantes de Lago Escondido y les aseguró que se quedarían en el sector de la orilla del lago pero que no ingresarían a la mansión.

Grabois argumentó que por tratarse de las costas de un lago y de un camino que la Justicia de Río Negro ratificó en distintos fallos como transitable, él y su gente no estaban cometiendo ninguna infracción.
En los alrededores se vio gente orinando en los grandes paños de césped que tiene la propiedad, mientras otros hacían camping y pescaban en el lago.